Playa y Orillas de la Isla

Llegamos a la orilla de la isla tomados de la mano, me sentía tan tranquilo y relajado, yo recordaba que Ikki nos había contado que en este sitio hacía demasiado calor, era verdad, la arena estaba cálida y el aire soplaba igual, pero corria algo de brisa y había algunos árboles bajo los cuales refugiarse del sol.

- Aquí no es donde llegan los barcos - comenté danodme cuenta de ese detalle, estamso del otro lado de la isla? - vale, podía despertar el sentido que uno quisiera, pero no era muy bueno para la geografía.

- Aquí no es donde llegan los barcos -

-¡M!-

- estamso del otro lado de la isla? -

- Si.-

Le reposndi al mirarlo...

-Asi es pingo...-

Le sonrei al mismo tiempo que sujetaba su mano la cual esta entrelazada a la mia al darle un leve apreton...

- Vaya... - comento mirando la inmensidad azul frente a nosotros - la isla es muy grande - vaya que lo era, seguro que yo solo ya me hubiera perdido aquí.

Me abracé de él bajo la sombra, sintiendo la brisa despeinar mis cabellos antes de sentarme en la arena, jalándolo de la mano para que se sentara junto a mi.

- Va a ser una boda linda, verdad? - lo miré con las cejas levantadas - la de Shun e Hypnos? - no me estaba burlando de sus berrinches, pero no pude evitar sonreir.

- Va a ser una boda linda, verdad? -

-¡Eh!-

- la de Shun e Hypnos? -

-¡Ja!... lindo el trasero golpeado de ese que se lleva a mi hermano.-

Dije refunfuñando al estar sentado junto a el en la arena calida de la orilla del mar bajo la sombra de las palmeras...

Me dio risa y dejo escapar una carcajada para luego poner la mano sobre su cabello y revolverlo ligeramente.

- Es muy bonito este lugar - digo con la vista clavada en las olas - supongo que si estuviera nada mas yo, me daria cuenta, pero no sería igual - deslicé uno de mis brazos en torno a su cintura - me gusta estar aqui contigo - sonreí, apoyándome en su hombro - pero no me gustaría dejar solo a Shun - acaricie su brazo despacio - y tu tampoco quieres que esté solo, verdad? Si voy yo también a la mansión, podría ayudarlo con los preparativos, que dices?

-¿Ya te quieres ir a la mansion Kido?-

Lo miro al recargarse en mi hombro...

-¿Tan pronto quieres estar alla?-

Suspiré, acercándome mas hasta quedar frente a él, entrelazando mis dedos con los suyos mientras lo veia a los ojos.

- No quiero irme - declaré con seguridad - quiero quedarme aquí contigo - apreté su mano con fuerza pero tú estas precupado por Shun y yo tambien un poco - acaricié su mejilla con la mano libre mientras le sonreía un poco - así que será mejor que yo lo alcance allá, no crees? Así tu estaras mas tranquilo y yo puedo volver cuando Hypnos termine sus asuntos y vuelva con Shun, que dices?

-No lo se... no quiero que te tardes... si vas a ir.-

Ultimadamente lo decidi... si Seiya cree que es lo mejor que sea asi... aunque me disgusta un poco la idea... y mas el que Hypnos se case con mi hermano... y lo peor es que se lo puede llevar muy lejos de mi... y eso no quiero que suceda...

Suspiré. Era mi imaginación o la había regado por completo?

- estas enojado? - pregunté jalando ligeramente la orilla de su playera como niño chiquito. Pero si hasta los ojos se me veía como de chiquillo regañado.

-No Seiya...-

Di una pausa para continuar al mirarlo...

-Solo que me molesta la noticia de que mi hermano se va a casar... siento como si me lo quitaran... aparte aun no me acostumbro de que el esta haciendo su vida como yo intento en hacer la mia.-

Volví a suspirar mientras acariciaba su cabello con una sonrisa triste.

- Nadie te lo va a quitar. – respondo con firmeza – él es tu hermano y a nadie en el mundo quiere igual que a ti, pero eso no quiere decir que no pueda querer a alguien mas. Tienes que hacerte a la idea aunque no te guste.

-Pues eso ya lo se... pero no es facil... y... no se que le vio en serio pero bueno.-

La verdad es que soy muy exigente con Shun... es decir... me gusta que todo lo tenga y no padezca mas de lo que ya pasamoa antes...

- Que ya! - exclamé viendolo hacer berrinche, Es que, cierto, su hermano se iba a casar, pero no era para tanto, el caso, tenía que hacer algo para distraerlo. Y con una sonrisita maliciosa se me ocurrió. No dije nada, simplemente tomé un puño de arena y se lo vacié en la cabeza. No me aguante la risa.

Cuando me arrojo literalmente arena en mi cabeza... mejor dicho vertio en mi esa arena en mi cabeza le conteso malicioso...

-No pingo... acabas de empezar la guerra de arena... y yo soy el mejor oponente que no se dejara.-

Tome entre mis manos el doble de arena que Seiya tomo y se las arroje practicamente en su cabeza y en su playera...

- Ah!!!!!!

Exclamé cuando me llenó de tierra, tuve que cerrar los ojos inclusive para que no me entrera, asi que me levanté alejandome unos cuantos pasos, recogiendo un puño mas de arena mientras me levantaba y aventándoselo de igual manera.

- Pero yo ne dejaré ganar!! - anuncié mientras la arena le caia en la ropa.

La guerra de arena a empezado... ambos nos arrojamos la tierra suave de las orillas de la playa hasta que en esas y en un microsegundo lo pezco al rodearlo entre mis brazos en su cintura para atraerlo mas a mi al reirme suavemente al verlo todo cubierto de arena...

- No, no! - manoteé mientras me sostenía entre sus brazos - te voy a ganar! - logré soltarme y salí corriendo de espaldas, aventándole de cuando en cuando puñados de arena húmeda de la orilla.

Este pingo es un remolino... pero aun asi va a ver... tambien le hago lo mismo al aventarle arena y tambien algo de arena humeda... y vuelvo a agarrarlo dela cintura... y que le planto un beso fuerte en sus labios...

Correspondí al beso con pasión, abrazándolo con fuerza mientras seguía sosteniendo un puñado de arena húmeda en la mano, sentí como la arena del rostro comenzaba a picarme cuando separé los labios y acaricié tímidamente su lengua, el corazón me dió un vuelco.

Me separé de él despacio, mirándolo ilusionado, sonreí entonces, dejé sobre su pecho el puño de arena con una gran sorisa antes de darme vuelta y seguir corriendo.

-¡Pingo!... no corras que yo al menos ya estoy ansiano...-

Corri un poco tras de el... pero ahora estaba caminando detras suyo a larga distancia... y es que el tiene mas energias que yo...

Me eché a reir de plano, regresandome después de haber corrido.

- Así que estás viejito, eh? - pregunté en tono de broma mientras me regresaba corriendo despacio, con tan mala suerte que me tropecé cuando ya lo estaba alcanzando y tuve que según yo, sostenerme de ñel para no caerme, total que acabamos los dos tirados en el suelo, llenos de arena y de agua de mar.

-Yo viejo y tu un atolondrado en caminar.-

Dije bormeando al tenerlo encima mio y todo cubierto de arena como yo... tanto seca como humeda... lo abrace mas a mi...

-Ay pingo... ¿que haremos conitgo pingo loco?-

Sonreí, recargándome de él, apoyando la cabeza en su hombro mientras el agua fresca seguía corriendo alrededor nuestro.

- Oye Ikki - comencé con aire inocente - me puedes decir que significa pingo? - levanté el rostro, parpadenado varias veces con aire de niño chiquito.

-¡Pues tu que crees!-

Le dije al sonreirle y en abrazalro mas...

-Si te digo pingo es porque eres muy inquieto... tienes demasiado energia en las venas... y yo que soy tan tranquilo... pues... ahora ya lo sabes.-