** Hacienda Fenix **

Dentro de mi territorio el cual es la Isla de la Reina Muerte se encuentra en uno de los peñascos altos de donde puedo observar todo el horizonte y todo mi territorio, se encuentra ubicada mi Hacienda es una construcción de grandes dimensiones abarca una hectárea (1000 mts), mi hacienda esta rodeada por muros de piedra de cantera color gris opaco, nunca me han gustado los colores vivos, estos muros resguardan mi pequeña casa la cual es una hacienda de 28 habitaciones, cómodamente amuebladas y diseñadas para el descanso y confort de mis huéspedes, pero como no permito que nadie entre a mi territorio... acepción de mi Otouto, esas habitaciones seguirán esperando ser visitadas, la cocina es amplia mi sala es de unos 20x20 mts, me gusta ver espacios amplios en mi casa, tengo muebles finos los cuales eh adquirido durante mis largos viajes, fuera de mi hacienda, tengo un jardín podría decirse que es mi patio trasero, es mas o menos de unos 400 mts donde tengo árboles tanto frutales como nativos de diferentes regiones, me gusta la naturaleza, también cuento con infinidad de flores, las que tanto le gustaba a esmeralda, por eso me encanta esta parte de mi hogar, dentro de este espacio corre un pequeño arguéllelo el único de agua cristalina en toda la isla, el cual alimenta a mi jardín y a mi con su dulce sonido. Mi hacienda mi pequeña casa es cómoda y sobre todo solitaria como a mi me gusta, nada ostentosa (si como no), pero si con pequeños lujos.

Llegamos a la casa en si... es inevitable que... por mas que no quiera ensuciar a su alrededor lo hace mas al no hacerlo... pero bueno... no es perfecto... volteo a verlo por fin al detener mis pasos...

-Esta es la casa... como podras ver esta bastante amplia... porque me gusta tener siquiera un lugar en donde vivir sumamente comodo...-

Suspire al ver el desastre que tiene encima...

-Sera mejor que vayamos hacia donde esta el baño...-

Off: Ya vi que era aqui, jejeje
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Entré con cara de idiota viendo todo, como si fuera un pueblerino deslumbrado en... otro pueblito. Digo, no es que la casa de Ikki no fuera la onda, pero estaba en el despoblado al fin y al cabo, cosas mas maravillosas había visto, ciudades, lugares, el elisyum!, pero aun así como que no dejaba de fascinarme eso de estar viendo su casa y notar cuales eran sus gustos, cosa que la verdad, nunca me había atrevido a imaginar como serían, suponía que eso de "no me gusta andar en grupos" era casi como vivir en una caverna con uan fogatita al lado y ya. Dioses, a veces era tan simple... *y tan pen..., según me dijo Aioria*


- Lo siento - me dio pena de verdad ensuciar el piso y hasta me puse un poquitito rojo - te ayudo a limpiarlo cuando me quite los zapatos, si? - mire mis converse, estaban hehcos un asco! Y no tenia mucho que me los había comprado, que horror, bueno, al menos sabía lavar y entre mas pronto les quitara el lodo mejor.

- Bueno, te sigo al baño - apreté la mochila, usandola casi como escudo protector, no de Ikki, que se estaba protando bien conmigo, sino de mi mismo y mis "ingenios".

- Lo siento -

-Lo he notado.-

- ¿te ayudo a limpiarlo cuando me quite los zapatos, si? -

-Lo que digas... pero vamos al baño para que te laves de pies a cabeza...-

- Bueno, te sigo al baño -

-Bien mocoso...-

Vamos a los baños que tengo en esta casa...

Regresé a la sala, ni señas de Ikki. Donde se habría metido? Suspiré, observando el rastro qeu había dejado a la entrada, sí, ese era yo mero, el que dejaba huella en todos lados y no precisamente por su personalidad, al menos, eso me dijo Afrodita cuando le ayudé con sus rosas y ensucie el camino desde el jardín hasta la sala.

Ahhh, un suspiro audible dejé salir y seguí recorriendo la casa, que de pequeña no tenía nada dicho fuera de paso, en busca ahora de una escoba y un trapeador.

Me acerqué a otra puerta al fondo, parecía ser la cocina.

Era como el antes y el después. Llevaba la mitad y ya me estaba arrepintiendo de hacerlo, este piso costaba de limpiar mas de lo que yo había pensado, pero ya ni modos, yo había ensuciado, yo tenía que limpiar, era eso sentido del deber, no? Bueno, eso me habái enseñado Marin y no iba a empezar a desobedecerla ahora, así que en lo que Ikki aparecía seguía co la escoba desapareciendo el polvo, ya casi terminaba.

- ¿Se puede saber que haces?-

Estaba por entrar a la cocina... y mi sorpresa fue en verlo ahi... con utensilios de limpieza... yo solo lo mire y pregunte tan directo como siempre he sido...

- Naaaada - asi o mas tipo graznido de pato la voz? Y para denotar mas que me habia puesto nervioso se me cae por poco el mugroso palo de escoba, gracias a Athena por los reflejos rápidos que no se fue al suelo. - Solo estaba limpiando la entrada - me quedé mirándolo con cautela, limpiar no tenía nada de malo que yo supiera, ahora resultaba que hasta por agarrar la escoba me iba a regañar, eso sí que no lo iba a permitir - que, no se ve? - me encogí de hombros, añadiendo eso último en un tono parecido al suyo.

- Solo estaba limpiando la entrada... que, no se ve?-

-Lo he notado.-

Tomo la escoba que tiene en sus manos al tenerla ahora yo...

-Eres un invitado aqui...-

Recojo todo no sin antes terminar lo que estaba haciendo... practicamente solo limpie lo ultimo... y me fui a la cocina no sin antes...

-¿Tienes hambre?-

Me quedé como menso, esa era la versión azucarada para decir "me quedé como soberano idiota" cuando se acercó y me quitó la escoba para recoger lo que quedaba de polvo, la verdad nunca me hubiera imaginadoa Ikki limpiando, ni mucho menos que tendrái esa clase de atención conmigo, ni tampoco que dijera que era invitado, me hacía sentir bienvenido en su "humilde morada". Sonreí, ese era el problema de ser transparente, cuando uno se ponía feliz lo dejaba notar, cuando no, también.

- Sí - contesté con demasiado entusiasmo a su pregunta, recriminandome mentalmente otra vez por pasarme de emoción, tenía que aprender a controlar eso, de ahora en adelante iba a ser mi mantra. - digo, sí - respondí ya normal - digo, no se hace uno trece horas de viaje hasta aca desde Japón y queda como si nada ni aun siendo un santo - expliqué, según yo, con aire de sapiencia.

Miro al detener mis pasos al mocoso que esta detras mio...

- digo, no se hace uno trece horas de viaje hasta aca desde Japón y queda como si nada ni aun siendo un santo.-

-Cierto... pero bueno... tienes que comer... y... ¿donde esta tus ropas sucias?-

Lo digo para ver que se puede hacer ante la sucia ropa de este mocoso tan extrovertido y casi imprudente en su andar... pero aun asi no debo preocuparme... porque es muy fuerte...

De plano ya no sabia ni que hacer, pero bueno, algo se me tenía que ocurrir, despues de todo no habia venido para que me tratara como "mocoso", tenia que demsotrarle que era uan persona madura, quizá no demasiado, pero que había madurado con todo lo que habia pasado en las guerras. Suspiré, tratando de recuperar el ánimo.

- Las dejé afuera de la cocina - expliqué, avanzando para alcanzarlo, casi felicitandome de que mi voz sonara despreocupada y normal, felicitación que duró hasta que, gracias a la maravilla de que había una mesita con un espejo colocado arriba donde descansaba un florero, al pasar junto a el, mi camisa se atoró en la orilla, haciendo que para evitar tirar el florero, me moviera sin mucha delicadeza, lo que, segun el efecto mariposa, el cual Myu se habia encargado de explicarme que significaba, logré salvar el florero, pero mis piecitos se quedaron retardados, haciendo que por poco me cayera, menos mal que se me ocurrió sujetarme de algo, que pronto descubrí, no era otra cosa que la camisa de Ikki, lo noté, porque se escuchó un sonido como de tela rompiendose.

Algo se rompio... pensaba ignorarlo hasta dejar las cosas en su lugar y ver despues de que se trata... pero algo me detuvo... asi que gire mi vista... y descubri que este mocosito se sostuvo de mi camisa... es decir... en la parte de atras... rompeindome por logica mi camisa....

-¡Pero que demonios!...-

Fue lo unico que blasfeme... puesto que al girarme completamente para encararlo... se rompio... me imagino que mostrando la mitad de la camisa que por obvio... se ve la mitad de mi espalda...

Deje la escoba y el redogedor en el piso... obvio me agache para dejarlso antes de botarlos y regar otra vez la suciedad que hizo Seiya en un momento atras... suspire calmando mis temperamento... despues de todo... quiero creer que fui un descuido mas... porque se que es muy hiper activo...

-Seiya...-

Ya ni supe que decirle... asi que empece a reirme... mas por ver la cara de susto de este niño y por la situacion que no spue ni que decir...

-¡Pero que demonios!...-

Casi me dieron ganas de tirarme al suelo y gritar Nooooooo! como en las películas gringas y que la tierra se abriera y me tragara completo.

Lo solté como si quemase, emoción muy rara pues por una parte no podía dejar de pensar que ahora si me sacaba a patadas y la otra, que mis mejillas estaban calidas, por no decir hirviendo, seña clara de que me había sonrojado demasiado y es que quien iba a decir que yo iba a reaccionar así de ver su espalda medio descubierta. Por Dios, me daba mucha vergüenza!

-Seiya...-

De plano, este día me habia levantado con el pie izquierdo, ya para que dudarlo, de plano me quedé parado como menso en medio de la sala y me tapé los ojos con la mano, esperando resignado a que me dijera que me fuera por donde había venido. De nada había servido tooooooodo el recorrido que había hecho preguntandole a santuario entero que pensaban de mí y que me podían aconsejar para "ser mejor" si había venido hasta aca y la habia regado otra vez.

Dejé salir un suspiro resignado, quitandome la mano de la cara, apenas entonces fue que me di cuenta que se estaba riendo, mas bien dicho, se estaba burlando de mí. Era raro, pues nunca había visto a Ikki riéndose, pero a la vez como que me daba coraje, ya no sabía si con él o conmigo mismo.

- Te estas burlando de mi? - espeté y aun cuando no quería hacerlo lo tomé del brazo y lo empujé ligeramente - fue un accidente - repliqué todo enfurruñado, tratando así de salvar la cara - deja de burlarte! Mira lo que hiciste, tiraste todo lo que ya habia levantado! - hasta señalé con aire ofendido la tierra desperdigada en el pasillo casi a la entrada de la cocina, colocandome frente a él con los brazos en jarras y mirándolo con cara de "malo" como hacía él, esperando a que se callara.

- ¿Te estas burlando de mi? -

Me seguia riendo y no precisamente de el... sino... por los sucesos que pasaron al momento... y senti que tomaba mi brazo para sacudirlo en actitud ofendida y tratando de explicarse...

- fue un accidente-

Trate de calmar mis risas hasta que volvio a decirme...

- ¡deja de burlarte! Mira lo que hiciste, tiraste todo lo que ya habia levantado!-

Termine de reirme y mas cuando señalo lo que tire... o sea el desastre de hace rato... para decirle al momento en que el... se pone de brazos cruzados al mirarme con cierta indignacion... hasta que por fin deje de reirme... y levanto las cosas como si nada al momento de irme a la cocina mientras le comentaba...

-¡Haber niñito!... en ningun momento me burle de ti... de haber sido asi... te lo hubiera restregado en palabras y risotadas... me rei por lo que paso... tratas de estarte tranquilo pero ambos sabemos que eres muy hiper activo...-

Este es el mejor momento para decirle lo que he notado desde que llego aqui...

-¡Crees que naci ayer o que!... me di cuenta de que quieres aparentar lo que no eres...-

Di una pasua en mis palabras al tirar en el bote de basura el desastre de momentos atras... para sacudir mis manos y decirle al verle por un momento al estar aun parado y con cara de asombro... y con cierto toque de palidez...

- Seiya... ¿porque quieres ser algo que no eres?... sabes.... seras muy... desastroso... impulsivo y extrovertido... pero... asi agradas... y si tratas de ser serio al restringir tu forma de ser... pierdes el tiempo porque tu no eres asi y a nadie... especialmente yo... quiero que cambies esa forma de ser tan tuya y especial... porque cada ser humano es especial... sea como sea... con virtudes y defectos.-

Termine mi brevierio cultural para cambiar el tema e ir al patio de servicio que esta conectado a la cocina para lavar las ropas sucias de Seiya... y las coloco en la lavadora...

-Espero que se limpien y sequen pronto tus ropas...-

Al menos tuvo la decencia de dejar de reirse, pensé con la ceja un poco arqueada cuando cerró la boca.


-¡Haber niñito!... en ningun momento me burle de ti... de haber sido asi... te lo hubiera restregado en palabras y risotadas... me rei por lo que paso... tratas de estarte tranquilo pero ambos sabemos que eres muy hiper activo...-

Ja, si como no. Como que se me hacia que hiperactivo era otra palabra para decir eres una desgracia andante, como me había llamado Afrodita.

-¡Crees que naci ayer o que!... me di cuenta de que quieres aparentar lo que no eres...-

Estaba a punto de reclamarle lo que había dicho, pero me quedé callado y hasta con al boca abierta y la mano a medio camino para tomarle del brazo y seguir reclamando. Parpadeé, a que venia eso que me estaba diciendo?! Cómo es que... me empezó a latir el pecho desaforadamente; cómo es que se daba cuenta de lo que me pasaba todo el mundo! Es que acaso tenái en la frente un letrero un pintado que decía me gusta Ikki?! Esto ya era el colmo! Digo, que Shun se hubiera dado cuenta, que otros en el santuario se hubieran dado cuenta de que traia "males de amor" diria Shura, era uan cosa, pero que ahora Ikki me echara en cara d de que queria aparentar cosas diferentes ya era otro cantar.

- Seiya... ¿porque quieres ser algo que no eres?... sabes.... seras muy... desastroso... impulsivo y extrovertido... pero... asi agradas... y si tratas de ser serio al restringir tu forma de ser... pierdes el tiempo porque tu no eres asi y a nadie... especialmente yo... quiero que cambies esa forma de ser tan tuya y especial... porque cada ser humano es especial... sea como sea... con virtudes y defectos.-

Evité mirarlo mientras hablaba y hablaba, o mas bien, mientras me estaba regañe y regañe, porque aunque no me estaba gritando me sentía como el niñito siendo regañado por su papá, qué, ya no podía uno tratar de cambiar o de "·madurar" como todo el mundo me pedía? Si la verdadera razón no se la iba a decir, pero pues tampoco eso queria decir que no pudiera cambiar para bien o no? O... bueno, eso creia yo.

-Espero que se limpien y sequen pronto tus ropas...-


- Eh ? - pregunté como menso, y sí, eso mismo era, que por andar cavilando que decir o qu ehacer él ya se habia adelantado e ido a echar la ropa aquien sabe donde, a la basura probablemente - Ah.. bueno, sí, gracias - de nuebas que no me puse mas en ridículo, pues luego me cayo el veinte de que lo que hacia era en realidad echarla a la lavadora, suspiré luego de eso.

- Y respecto a lo otro - habia uan parte de mi cabeza que decia que mejor dejara por la paz el tema, pero como muchas veces la razón no gobernaba en mí, tenái que regresar a lo mismo. - no estoy fingiendo nada - repliqué enfurruñado - solo quiero madurar, todo el mundo dice que soy un tarado - la verdad nada me habia dicho especificamente esas palabras, pero yo suponía que se las guardaban.

- Eh ? -

Fue lo que me pudo contestar ahora... digo... despues de mi choro mareador que me avente no es para menos que se haya perdido en algun punto de la conversacion... pero se que lo habra analizado... asi que... me vi en la tarea de volverle a decir lo que dije hace unos momentos pero...

- Ah.. bueno, sí, gracias -

Pero veo que no reacciono del todo... me le quedo viendo hasta que por fin le cayo en cuenta... me rei levemente... y dejar el tema por la paz... pero creo que este niño no lo dejaria del todo...

- Y respecto a lo otro -


Iba a responder su cuestionammiento pero...

- no estoy fingiendo nada -

-Seiya...-

- solo quiero madurar, todo el mundo dice que soy un tarado -

Realmente lo decie en serio y enojado... asi que adivinando un poco el porque de las cosas... me atrevi a opinar... mas al mirarlo a los ojos...

-Seiya... ¿te preocupa el que te digan asi?... la gente no es perfecta... y nadie madura al 100 %... maduraras a su debido tiempo... no te aceleres... ¿tu crees que yo soy maduro por el hecho de tener un caracter de los mil demonios?... no lo creo...-

Deje prendida y notificada la lavadora para irme hacia donde el esta... me detengo al estar frente a el... y casi cerca de su persona...

- Nadie es perfecto... muy a mi pesar... muy a mi estilo... se que... no soy perfecto... y a ti no te deberia de importar lo que los demas puedan decir de ti... los que te quieren y aprecian... son los que te aceptan tal y como eres... hasta yo...-

Eso ultimo me apeno un poco... me quedo callado para ver si ya le entro en la cabeza que esas ideas son tontas... mientras que oculto lo mas que pudo el sonrojo de mis mejillas... la verdad no se porque diablos me apena esto...

-Seiya... ¿te preocupa el que te digan asi?... la gente no es perfecta... y nadie madura al 100 %... maduraras a su debido tiempo... no te aceleres... ¿tu crees que yo soy maduro por el hecho de tener un caracter de los mil demonios?... no lo creo...-

No se que me puso mas nervioso, si el rumbo de la conversación, si el que me mirara con ojos de vas a desaparecer si sigues con tus babosadas o de plano que se hubiera puesto tan cerca.

- Nadie es perfecto... muy a mi pesar... muy a mi estilo... se que... no soy perfecto... y a ti no te deberia de importar lo que los demas puedan decir de ti... los que te quieren y aprecian... son los que te aceptan tal y como eres... hasta yo...-

Auxilio! Precaución! Alerta roja! Eso mero, se me puso la cara roja! Mi pobre corazoncito latía a mil por hora mientras la cara con aspecto de semáforo parecía que se me había quedado clavada al cuello, que qué?! Que me aceptaba como era?! Igual y no significaba nada, pero soñar no costaba nada y en ese momento soñar que Ikki no pensaba que era un menso sin remedio era como música para mis oídos; para mis oídos imaginarios, pues.
Levanté la cabeza, con ojitos brillantes estilo anime de niñas, abrí la boca para decir algo, algo interesante claro, pero claro igual, uno siempre contaba con que el cerebro iba por un lado y la boca por otra.

- Entonces si tengo esperanzas de que me quie… -

“Seiya!!!!!!!!!!! Eres un pen……..” Aioria me gritó eso cuando saqué sus revistas porno de debajo del colchón y las dejé a la vista, sin querer claro estaba, de Marín, es que cuando me dijo que le ayudara a limpiar como castigo por haber roto muchos platos en la cocina, se me olvidó guardarlos. Ahorita precisamente esas mismitas palabras me las repetí yo solito.

Una nueva faceta en este niño me ha mostrado... se asombro demasiado... jamas lo habia visto asi... y menos el que le importara la opinion de los demas... me extraño verlo asi... mmmm... ahora que lo veo... algo se trae... y mas cuando dijo unas palabras seguras que decayeron en casi un susurro... pero apenas lo escuche cuando decidio cortar en seco...

- Entonces si tengo esperanzas de que me quie… -

Algo traia este... asi que... me acerco mas a su rostro en curiosidad... sospecha y de querer que sea directo... que no me oculte nada...

- ¿Esperanzas de que o sobre que?-

Volvi a insistir al ver la cara de susto que tiene... como si hubiera visto un muerto o algo asi... y eso es un algo asi... porque se que no es para tanto... pero algo se trae... insisto... y le insistire en saber...

- ¡Dime!-

Dije mas directo... y otra ves y con mas decision...

-¡¡No te iras de aqui sin decirme que te traes!!... ve al grano... no te detengas por mi...-

Cara de venado asustado en mitad de la carretera helada, por la noche, deslumbrado por los faros de un coche… o algo por el estilo, eso lo leí en un libro de Hyoga, lo cual me sorprendió, no sabía que tenia libros, pero este no era momento para pensar en esas tarugadas! Ikki estaba enfrente de mí! Cerca, demasiado cerca. No sabía si debía salir corriendo o que hacer, que qué hacer, bueno sí sabía que quería, pero entre querer y hacer era muy distinto.

- ¿Esperanzas de que o sobre que?- - ¡Dime!-

Me hice hacia atrás tratando de hacer un poco mas grande la distancia, pero no llegué muy lejos pues me topé contra la pared, alarmado y mirándolo como si me fuera a hacer algo malo, buscando a ver que me inventaba para salir del paso.

-¡¡No te iras de aqui sin decirme que te traes!!... ve al grano... no te detengas por mi...-

Lo malo es que eso no era buen indicio y la manera en que me miraba me hacía sospechar que no se iba a tragar fácilmente alguna de mis historias fantásticas. Calma, Seiya, calma… me repetí varias veces, pero como mantener la calma cuando el cerebro traidor se congela y no trae ninguna historia plausible a colación!

- Yo… - ja y la boca como de costumbre metiendo la pata – es que yo… - silencio y mas silencio. Si hacía concurso de quien podía sostener mas tiempo la mirada definitivamente ya me había ganado – es que yo vine a verte para decirte algo – dejé escapar el aire al fin, sin querer acercando mi rostro al suyo - pero… seguro te vas a enojar - de nuevo esa costumbre de juntar los dedos y bajar los ojos, que para la excelsa suerte que me cargaba hoy, fueron a dar, de veras, que buena suerte, sobre su boca. Porque a mi, pensé casi haciendo la cara de puchero, porqué me pasaban esas cosas a mí, si aparte de menso, era transparente, era casi como tener un letrero en la cara, así todo rojo como estaba.

Me le acerque lo mas posible a su cara y deteniendo cualquier paso atras... lo tengo acorralado por asi decirlo... ¡ah no!... ¡no se ira asi de facil!... quiero saber que le pasa... y por fin articulas algunas palabras...

- Yo… -

-Aja... ¿tu que?-

– es que yo… -

-¿Si?-

Espero unos minutos de silencio para ver que me decia... y se cuando me mienten o mejor dicho... cuando no van al grano en primer lugar a taparlo con excusas...

- es que yo vine a verte para decirte algo –

- ¿Aja?... dime...-

- pero… seguro te vas a enojar -

Me lo dice al bajar su vista y juntar sus dedos para jugar nerviosamente o al menos entretenerse... y eso que hace de su boca... ¿es un puchero?... ja... vaya que si lo es... eso me recuerda como era Shun de pequeño... bueno aun lo es pero no tanto... en fin... dejo eso aun lado y le digo serio sin moverme ni cambiar mi postura... a excepcion de estar un poco mas tranquilo...

- ¿De que me voy a enojer si aun no me dices que es?... anda... dilo de una buena vez.-

Esto se llamaba tortura pura y dura. Qué, no se daba cuenta de que no quería decir nada!!!!!!!! Y todavía se complacia en decirme eso de no me voy a enojar, sí como no, lo fulminé con la mirada tantito, lo malo, es que no tenia efecto, si ibamos a miradas de soy malo muy malo, el me ganaba, eso sin tomar en cuenta que me ponía nervioso que estuviera tan cerca de mí.

Cerca... de verdad tenía puntitos como grises en los ojos? No recordaba haberme fijado en eso antes, quizá porque estaba exageraaaaaaadamente cerca. Tanto que si respiraba sentía el frescor de mi respiración que chocaba contra su piel y se me devolvía, no se como le haci apara que las rodillas no se me volvieran de gelatina.

- Pues ahora ya no te digo nada - repliqué con el ceño fruncido, con las últimas briznas de valentía que me quedaban - no me inspiras confianza - todavia dije, achicando los ojos como retándolo y acercando unos milimetros mas el rostro.

- Pues ahora ya no te digo nada -

Lo miro cinicamente sorprendido... y todavia remata con decirme...

- no me inspiras confianza -

¡Ja!... ¡como se atreve a decirme eso... se que siempre ha sido un osado... o mejor dicho un rebelde mocoso insensato... pero ultimadamente tiene razon... pues a mi que...

Sin decirle nada me alejo de el... sonrio tranquilamente al dirigirme al patio de servicio justamente cuando se termina el ciclo de lavado... ahora lo meto en la secadora... y me quedo ahi esperando que termine este ciclo...

- Ahi esta el refrigerador... por si tienes todavia hambre... para que comas...-

Sone muy tranquilo... al estar al pendiente de sus ropas...

- Ahi esta el refrigerador... por si tienes todavia hambre... para que comas...-


No era justo. Bueno, no había muchas cosas justas en la vida como sea, aunuq eno pude evitar sentir que me quitaban algo cuando se apartó para seguir con la ropa, que... momento, no se suponía que ra mi ropa y yo la tenia que lavar? Hice los ojos hacia arriba como pensando en eso par aluego despegarme de la pared.

- No tengo hambre - contesté como niño emberrinchado. No era por nada, pero sentía que acababa de perder uan de las pocas oportunidades que tenia para, al menos, llevarme bien con Ikki, seguro que se iba a cualquier otro lado que no fuera conmigo. Y fue en ese momento que me di cuenta...

- Oye, a poco vives tu solo en esta casota? - pregunté como niño, hasta parpadeando con aire de chiquillo que pregunta como le hace el jardín de Shaka para crecer si nadie lo riega.

- No tengo hambre -

¡Vaya con este niño!... ¿pues que se traera?... en fin... sea como sea... no debe de importarme... puesto que el sabra a quien decirle y a quien no... por lo pronto estoy en la espera de que el ciclo de secado termine...

- Oye, a poco vives tu solo en esta casota? -

-Pues... hasta ahora si... tengo habitaciones de sobra... una para mi Otouto... y otras para invitados... no seran muchas pero... creo que las suficientes...-

Dije al momento en que sacaba las ropas secas de la secadora... me dirigo a donde esta el...