.:*:. Templo de Geminis .:*:.

Sonrio desde donde me encuentro, era de esperarse que me notara. Sali de mi escondite saludando al ariano con la mano para después acercarme a mi igual, y pasar mi mano por su hombro, dejando la otra resposando sobre su pecho.

-Veo que has notado mi presencia Saga...- Mire de reojo a Mu y volví a centrar mi antención en las pupilas de mar, con un brillo casi tan lucido como el mio.

-He venido a visitarte...-Exclame acercando mis labios a su mejilla y depositando un beso sobre su piel.

Me limite a soltarlo sin dejar de mirar a Aries, después de eso me continuaba imaginando como reaccionaria.

- Si, me gustaria tomar algo- Camine detras de mi hermano dandole alcance para abrazarlo por su espalda, dejando mis manos reposar sobre su cuello.

-Bastante de que hablar Saga, la última ocación no pudimos hacerlo-Continue en aquella posición, ignorando olímpicamente a la compañia de mi hermano.

Tomo la copa de vino entre mis manos, levantando la mirada al sentir el suave contacto que ejerce su piel contra la mia, repaso en mi mente sus palabras, hacia mucho tiempo que no lo escuchaba hablar así, generalmente yo era el desinteresado (aun lo soy) y él quien se esforzaba por mantener nuestros lazos apesar del tiempo y el correr de los años. Sin embargo tras la duplicidad de su mente eso se había perdido, dandole incluso la fuerza para encerrarme en aquella carcel en Sunión.

Me percato de que me he quedado en silencio y le sonrio, juntando mi frente con la suya.

-He vuelto a casa hermano- Mi voz se ha suavisado, mi mirada cobra esa picardía chispeante que tiene mi personalidad, contrastante con la suya.

-Me alegra que estemos juntos de nuevo y ojala esta vez sea diferente- Es decir, que fuese como antes, antes de imponer cada uno una barrera lo suficientemente grande y fuerte como para separarnos.

miro que llega kanon y me saluda y le correspondo ya me iba a despedir pero no pude pues me ignoraron eso si que me hizo enojar y actue como cordero enojado y les doy un coscorron y traigo unas cadenas pesdas y les doy con ellas hasta dejarles moretones para cada uno

-bueno me voy ya que me ignoran y no dejan que me despidan amablemente-

-jamas enojen o ignoren un signo cuyo animal tenga cuernos-

dije indignado hechando humo y me teletransporto a mi templo

Me quede mirando la estela brillante que dejo el carnero al teletransportarse, vaya que podía ser agresivo quien lo diria del más calmado de los 12, ¿por que era que siempre terminaba alguien golpeandome? me sobe la cabeza hasta que senti la mano de mi hermano y la baje, sobando a la vez donde aries le habia pegado a él.

-Nunca pensé que fuera tan agresivo- Me abrazo al cuerpo de mi hermano, acomodandome sobre su pecho.

-Ya te he perdonado Saga - Respondo haciendo referencia a sunion. -También espero me perdones por manchar tu ideal de proteger a Athena, cuando desperte a Poseidón-

Lo mire a los ojos, realmente era como ver mi reflejo solo que con el semblante más duro.

-Saga... cuando volviste... tu sabias que estaba vivo, ¿por que no me buscaste?...- Desvie la mirada y me regargue sobre la pared cruzando los brazos sobre mi cintura.

-¿Tenias pensado decirme que habias ido con otro proposito disinto al de matar Athena?-

- A veces me pregunto que habrias hecho... si no te hubieras suicidado, ¿que habrias hecho al saber que fui yo quien libero a poseidon?- Siempre había tenido esa duda, aún cuando mi último impulso para derrocar al santuario y apoderarme del mundo se vio alzado cuando me entere de la muerte de Saga, mi intencion era ver cumplido algo que su parte mala no logro.

Esta vez volvi a mirarlo, esperando por su respuesta.