Kamazutra Saint Seiya

-Bonita sonrisa, juez Minos, por que no te acercas un poquito mas?

Mientras no me olvido de la hermosa diosa situada encima y la sigo acariciando, subiendo mi mano por un costado hasta llegar a su hombro y de alli bajar hasta tocar uno de sus senos. Sonrio mientras que con la otra mano la atraigo mas hacia mi pues deseo besar sus dulces labios. Aunque antes...

-Minos-chan parece muy contento de vernos, por mi no hay inconveniente en que se acerque un poquito mas.- tras lo cual me uno en un largo beso con Hera.

Es cierto tiene una hermosa sonrisa, lastima que desde aquí no
se pueda apreciar mejor....
Sonrío al sentir sus manos acariciando mi cuerpo y justo antes de besarnos
Nos miramos y sin decir palabra alguna acordamos traer junto a nosotros al juez...
-Tu sabes que yo tampoco tengo incoveniente, Shaka..

Ven Minos, aun hay espacio para ti aquí...le digo mientras acaricio
el torax del rubio caballero, para luego fundirnos en un apasionado beso...

Sin dejarle mucho a la imaginación a nuestro sonriente observador....

Mientras que Minos se decide o no a venir, Hera y yo seguimos con la tarea que habiamos comenzado. Mis manos acarician su espalda y se pierden enredandose en esos hermosos mechones del color del fuego.
Miro a sus ojos verdes sin aun abrir los mios y susurro a su oido.

-Soy vuestro...

Escucho la voz de Shaka, un "soy vuestro" entrecortado y me acerco tanto que su aroma comienza a embriagarme.

- Eso deberías decirme a mi hermoso rubio, ella es tuya y tú serás mío.

No sé qué es lo primero que me llama la atención, ambos cuerpos lucen apetecibles y mis manos no son suficientes para abarcarlos, así que me limito a deslizar la ropa por mi cuerpo para quedar en igualdad de condiciones.

Mi atencion se vuelve al juez Minos, !menudo cuerpazo!.
-Es una lastima que vivas en el Inframundo, deberias salir mas.

Shaka se acerca a el y tras besar a la diosa acerca sus labios a Minos.

Sonrío mientras veo a Minos acercarse lentamente a Shaka, que en un susurro me dice
-Soy vuestro...

-En realidad querido rubio, en este momento yo soy tuya..
Sus ojos continuaban aun cerrados y eso me motivaba aún más a empezar esos pequeños
movimientos circulares de mi caderas alrededor de las suyas...

Aún nos besabamos cuando minos se acercó por completo al rubio, quedando el envuelto también en ese aroma embriagador del guardian de la sexta casa...Cayendo el tambien en el dulce embrujo de sus labios...mientras acaricio el suave cabello de ambos caballeros

-Hera-sama, sois exquisita... -susurro mientras continuo moviendome al unisono con ella y me vuelvo hacia el juez Minos de quien estoy deseoso de probar sus labios.

escucho cosas extrañas no sera que..........

Nunca habia conocido un placer tan exquisito, el juez besa de maravilla... y en cuanto a Hera-sama, que mas puedo decir? Simplemente es divina, absolutamente divina.
Esos cabellos rojos como el fuego, ondeando, suaves al tacto, contrastan con los plateados de Minos, suaves tambien. Pocas veces he estado indeciso, pero esta ocasion es una de ellas, no se a quien besar primero, ambos son deliciosos.

Otra presencia se hace notar cerca de alli... parece que tendremos otra visita.

Apunto de perderme en los labios de Shaka, mi imaginación solía vagar rápidamente, no tenía la capacidad de concentrarme en una sola cosa por mucho tiempo y no necesitaba de mucho para excitarme... mordí con lentitud el labio inferior del hermoso rubio, ahogando un leve gemido proveniente de la actividad de Hera. Mi lengua se introduce ansiosa para explorar su boca mientras una de mis manos baja hasta uno de sus pesones y lo acaricia con insistencia, sintindo como se endurece entre mis dedos.

Una sensación extraña, una especie de alerta por un no sé qué, que acontece un no sé cuando...


- Lune... - musito sin saber muy bien que hacer o decir.

En este momento no me importa si es dios o mortal, la sola sensación de su cuerpo en mi,
me provoca el mas grande y dulce de los placeres...

El sabor de sus labios y el roce de su piel son casi tan embriagadores como la
misma ambrosía...
Sus manos ahora acarician mi cabello y el de Minos uniendo algunas hebras
le cedo espacio al juez para que pueda deleitarse con el delicioso nectar del rubio guardian...

Mientras le sonrío y mentalmente le digo:
Creo que me he adelantado y he hecho más facil tu eleccion mi hermoso rubio...
A mi ya me has probado antes...goza ahora de el que yo disfrutare de verlos a ambos

Los movimientos de Hera-sama me vuelven loco y me causan un placer infinito. Este se ve aumentado por los deliciosos besos y mordidas de Minos. Manos diferentes recorren mi cuerpo, una de las mias, sigue concentrada en la bella diosa olimpica y la otra devuelve las atenciones al juez, acariciando sus hombros y largos cabellos.

Besos de ambos, alternandose, explorando mi boca y yo la de ellos.

Lune... oigo decir a Minos. Por un momento pienso, "aqui solo estamos Hera y yo...", asi que... debe ser la presencia que note antes.

Hera-sama, sois tan magnanima como bella, pero no os corteis, por mi podeis seguir o si preferis, entonces que os gustaria que hicieramos Minos y yo?

Esta vez mi risa es abierta...No creas mi hermoso rubio contigo soy magnanima pero el tenerte
siempre es un placer egoista....

-No te creas que me pienso cortar, ni en un millón de años volveremos a
vivir este momento jamás...
La sensación de tener a ambos acariciando mi cuerpo es sencillamente perfecta, mi
cuerpo se estremecía estre los besos de shaka y las caricias que Minos proporcionaba
a mis pechos...

Una oleada de infinito y doloroso placer con un orgasmo casi interminable debido a las embestidas
del rubio caballero y la sola imagen de verlos ahora a ambos besarse, mientras siento sus cuerpos entre el mío, logrado que el extasis me nuble vista por un instante

El notar como Hera se estremecia y el sentir sus contracciones sobre mi hombria, la cual se encontraba regada con la humedad de aquel caluroso nidito... eran maravillosas. Sus sacudidas estuvieron a punto de hacer que me viniera dentro de ella, pero no se si hacerlo sin su permiso... Entretanto, Minos nos sigue prodigando atenciones a ambos y yo... no puedo dejar de acariciar y besar a ese juez tan hermoso.

- Cambiemos de posición - digo esperando por fin penetrar el delicioso cuerpo del hermoso rubio y lo ayudo a incorporarse, lástima que él está abajo y tengo casi nada de acceso a su entrada trasera - Lo lamento Hera-sama, tendrá que quedar abajo esta vez - musito acariciando los muslos de Shaka con morbosa desesperación, dejando que mis dedos se delicen por ambas pieles, deteniéndose en distintas partes de su anatomía.

Sus embestidas se acelran un poco más convirtiendose ahora en deliciosas estocadas que se hunden en mi vientre llenandolo de infinito placer, apresurando las contracciones de mi vientre con sus vaiven cada vez mas profundo y fuerte...

Puedo ver en su rostro la mezcla de placer, y al sentir sus mano apretando mi cadera, sé que esta por venirse dentro de mi...lo cual me incita a moverme un poco mas fuerte, para provocar su eyaculación dentro de mi húmedo vientre...

Me hago hacia adelante hasta quedar a la altura de su rostro...

Hazlo si quieres...hoy soy tuya, lo recuerdas?...

Mientras ladeo mi cabeza y beso el lóbulo de la oreja de Minos...

Hazlo si quieres, hoy soy tuya... lo recuerdas?
Aquellas palabras me excitaron aun mas, pero perversamente decido no salir aun, asi que con dos dedos agarro la base de mi hombria hasta que la sensacion de llegar al limite abate un poquito. Tan solo se trata de una medida temporal, pero suficiente para prolongar este placer tan unico.
En cuanto a Minos... se cuales son sus intenciones, y aunque no tengo inconveniente alguno, creo que es mejor hacerle esperar. Tal vez sea un poco cruel, pero.... todo tiene su precio y yo no me vendo barato.

Nuestra posicion esta invertida, ahora soy yo quien esta encima mientras que MInos acaricia mis muslos, pero mi mano detiene la suya y la lleva a mis labios para besar sus dedos y mordisquearlos.
-A que tanta prisa, mi querido juez?

Me enloquese por completo sentir su peso encima mío, Minos no lo sabía cuando propuso el cambio de posiciones, pero Shaka sabe como hacerme temblar bajo su cuerpo, provocandome orgasmos practicamente incontenibles, sintiendo su cabello caer en mis hombros y juntando aún más nuestros ya sudorosos cuerpos...

La tecnica de presión sobre la base de su sexo alarga más aún la humeda lucha que ambos teniamos y deja que Minos se pueda divertir un poco más con el rubio...

Mi visión ahora es menor pero el placer de sentir sin ver es infinitamente mayor, el juez al acariciar con desesperación los muslos de Shaka tambien me roza la piel aunmentando más mi deseo...
Hasta que Shaka detiene al Juez y tomando su mano la lleva hasta su boca para besar los dedos de Minos....mientras le dice...

-A que tanta prisa, mi querido juez?

Solo sonrío al escucharlo, sé muy bien que mi hermoso rubio es de llevar las cosas
con calma y de alargar el momento del placer hasta el límite...y eso al hermoso juez le
llevaría mucho tiempo entenderlo...

Mientras besaba el dedo meñique de Minos, ladee mi cabeza y atrapé sus labios y el dedo del juez con mi boca besando ambos...para luego liberarlos y susurrarle al rubio:

-Nuestro bello invitado tiene mucho que aprender de nuestras sesiones de tantra no crees Shaka?

Disfruto al ver que mi deliciosa amante se lo esta pasando de maravilla con lo que le estoy haciendo, aunque me supone una pequena tortura el no r vaciarme dentro de ella por ahora, merece la pena, pues el placer de ambos se esta prolongando aun mas. Al igual que creo que un cierto juez tambien disfruta ya no tan solo como espectador, sino como parte activa.
No soy indiferente a las atenciones de Minos, en absoluto pues me encanta su tacto y la forma en que sus habiles manos acarician mi trasero y mi espalda. Adoro esos movimientos circulares que en cierto modo, sirven de ayuda para dar mayor placer a Hera-sama.

Siento poco despues su calido aliento en mi oido cuando dice que Minos necesita un poco mas de paciencia y sonrio.
-Estoy en pleno acuerdo -susurro y vuelvo mi rostro hacia el del otro chico- Minos-san, eres muy bello... ten un poquito de paciencia. El arbol tardio siempre proporciona la mejor fruta...


Le pedi que me besara y guie su mano para que acariciara mis tetillas.

"Paciencia"

- ¿Paciencia? - digo como si fuera una palabra desconocida hasta entonces, como si no reconociera su significado y es que paciencia es lo último que tengo en este momento. Mis labios se unen a los suyos y recargo levemente mi cuerpo sobre el suyo, antes de pasar mis manos por su cintura y subirlas con lentitud acariciando sus tetillas, se ponen erectas rápidamente y la sensación se vuelve tan placentera que termino restregándome con suavidad.

Luego una de mis manos baja con descaro entre el cuerpo de Hera y se detiene en su intimidad, la cual es invadida una y otra vez por el hermoso rubio, lo ideal es que yo lo embistiera mientras él hace lo propio con la bella dama, pero lo cierto es que no me atrevo a penetrarlo sin haberlo preparado antes y la posición no es muy cómoda. Así que me limito a acariciar su miembro cuando sale y después busco estimular el clítoris de Hera, se siente como un pequeño botón húmedo, prefiero el sexo oral, prefiero comenzar con sexo oral, y la imagen de cierto espectro berrinchudo viene a mi mente, intento no pensarlo pero me es imposible.

Paciencia no parece ser una palabra que exista en su diccionario, pero si quiere poseerme eso es algo que tendra que ejercitar por un ratito. Si ha esperado todo este tiempo, bien puede esperar unos minutos mas, a fin de cuentas, cuando algo cuesta de obtenerse es mucho mas agradable la sensacion de satisfaccion al haberlo conseguido.
Despues de acariciarme, y debo reconocer que lo hace de maravilla; esas manos suyas son un autentico portento, se va a proporcionar un exquisito placer a la bella diosa. No se si Hera-sama querra que continue dentro de ella o si prefiere recibir las atenciones de Minos solamente...

Acaricio los largos cabellos del juez Minos, tan atractivo, tan sensual....

Definitivamente nuestro querido Juez no goza de la divina paciencia...

Pero sabe muy bien como aprovechar el momento y exitarnos a ambos introduciendo su mano entre mi vientre y el de Shaka, acariciándonos con un delicioso descaro a ambos, pasando su mano una y otra vez por la parte más sensible de mi sexo, llenándome de infinito placer, que por más que intento no puedo dejar de escapar un gemido cargado de satisfacción al sentir toda mi intimidad siendo satisfecha por ambos...

Haciéndome explotar de nuevo ambos, en otro extaciante orgasmo, al cual no dejo que lo
controlen mis sentidos, dejándome sentir poseída...

Estiro mi brazo derecho y atraigo el rostro del hermoso juez hasta el mío para besarlo enredando nuestras lenguas en una esquizofrénica lucha, para luego besar al bello rubio que aún me posee...

Lo miro a los ojos mientras aferro mis manos a su espalda y elevo un poco mi cadera
para dejar todo listo para la estocada final...

El placer más dulce y doloroso que cualquier hombre puede experimentar, pero que muy
pocos se puden dar el lujo de tener dentro del vientre de una diosa...ese es mi obsequio para
mi maravilloso y rubio amante...

¡Shaka, hazlo!...

Luego de decir eso, vuelvo a sellar mis labios con los del juez,
aferrandolo más con mi brazo libre a la espalda de Shaka ...

Hera ciertamente esta disfrutando de las atenciones de ambos, y recompensa al juez con un larguisimo y apasionado beso mientras yo sigo conectado a ella. El verla llegar al extasis de la forma en que lo hace no es un privilegio que se conceda a cualquier mortal y me siento honrado de ser uno que lo puede experimentar.

!Shaka, hazlo!.

Mis dudas iniciales acerca de si me iba a vaciar en su interior definitivamente desaparecieron tras oir aquellas dos palabras, ninguna explicacion era necesaria para saber a que se referia la hermosa diosa de largos cabellos rojos y ojos verdes. No necesite mucho mas tiempo para satisfacer el deseo de ambos y pronto mi esencia se esparcio inundando su interior, a la vista de Minos... a quien Hera acerca fisicamente mas a mi...

No necesite mucho mas tiempo para satisfacer el deseo de ambos y pronto mi esencia se esparcio inundando su interior, a la vista de Minos... a quien Hera acerca fisicamente mas a mi...

Luego de besar a Minos, acaricio el rostro de mi amante y le dedico exclusivamente a el esos últimos instantes de placer, a punto de llegar ambos al climax, me aferró con mas fuerza a su espalda y piernas y siento su calida esencia inundar el interior de mi vientre, haciéndome sentir dichosa de haberselo permitido...

-Me has hecho inmensamente feliz...pero esto es sólo el principio...si no te molesta creo que nuestro invitado necesita un poco mas de nuestras atenciones....

Besé sus labios, para ceder mi lugar al Juez y mientras el se dedica al rubio yo dedicarme un poco más a él...